El déficit de la enzima Diamino Oxidasa (DAO), principal enzima encargada del metabolismo de la histamina alimentaria, está sirviendo como nuevo diagnóstico para justificar la aparición de diferentes síntomas clínicos, como la migraña, la urticaria o algunos desórdenes digestivos, entre otros (JONNPR 2019;4(7):671-745).

La histamina es una sustancia química simple que se encuentra en el organismo en forma de amina. Es un importante mediador de enfermedades alérgicas como rinitis (fiebre de heno) y asma bronquial. Además, es la principal causa de urticaria en caso de intolerancia a la histamina. Se encuentra relacionada a procesos fisiológicos como dolor de cabeza intenso, respiración congestionada, goteo nasal, taquicardia, extrasístoles, dilatación de vasos sanguíneos, contracción del útero y dolencias gastrointestinales (DAO_REA_140916). La histamina se puede encontrar en cantidades elevadas en ciertas variedades de alimentos como el pescado, y en productos fermentados como vinos, quesos y derivados cárnicos crudos-curados.

En personas sanas y en condiciones normales existen dos rutas importantes para metabolizar la histamina, donde participan las enzimas Histamina-N-Metiltransferasa (HMT) y Diamino Oxidasa (DAO). La HMT se expresa en casi todos los tejidos, mientras que la DAO se expresa sólo en algunos tejidos, concretamente el intestino, el hígado, el riñón y la placenta. Se piensa que los tejidos que contienen DAO son determinantes en el control sistémico de la biodisponibilidad de la histamina. En el epitelio intestinal la DAO es responsable de metabolizar la histamina procedente de los alimentos, regulando su paso hacia la sangre portal. La actividad DAO del hígado regula su paso hacia la circulación sistémica y también es importante la actividad del riñón, degradando la histamina reabsorbida en el túbulo proximal.

Cuando existe una desproporción entre la histamina ingerida y la capacidad de metabolización de la misma, se produce su acumulación en sangre y la aparición de los efectos adversos. Esto es lo que sucede en el caso de la intolerancia a la histamina o histaminosis alimentaria, debido a una baja actividad de la DAO intestinal. El origen de esta deficiencia enzimática puede ser:

  • Genético: se han identificado polimorfismos genéticos con diferente actividad enzimática.
  • Patológico: la deficiencia de DAO parece ser más prevalente en población con enfermedades inflamatorias intestinales (colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn).
  • Farmacológico: por bloqueo o inhibición de la DAO por parte de varios fármacos.

Este riesgo parece relativamente importante, ya que algunos de estos medicamentos son de uso común (acetilcisteina, ácido clavulanico, metoclopramida, verapamilo, isoniazida) y algunos de ellos incluso se pueden adquirir sin receta médica. La gran variedad de síntomas derivados de la intolerancia a la histamina, asociados a patologías crónicas de gran prevalencia en la población, exigen que la investigación en este campo no se detenga y que se avance en el conocimiento de su origen y en los posibles tratamientos.

Los síntomas más frecuentes derivados del déficit de DAO son:

  • Migraña y otras cefaleas vasculares.
  • Trastornos dermatológicos como piel seca, atopia o psoriasis.
  • Dolores en tejidos blandos c on frecuencia diagnosticados como fibromialgia.
  • Fatiga crónica.
  • Trastornos gastrointestinales, especialmente aquellos asociados al Síndrome del Intestino Irritable (SII), como estreñimiento, diarrea, saciedad, flatulencia o sensación de hinchazón.
  • En la infancia y adolescencia se ha relacionado el déficit de DAO con el trastorno de atención e hiperactividad (TDAH) (M. Carmen Vidal Carou, 2012).

Es evidente que uno de los factores por los que se produce déficit de DAO es la genética. En un mismo grupo familiar, sus miembros comparten el déficit y muchas patologías crónicas tildadas hasta ahora como “hereditarias”.

La secuencia genética de la DAO se encuentra en un fragmento localizado en el cromosoma 7 (7q34-q36) del genoma humano y está compuesto por 5 exones y 4 intrones.

Se han encontrado muchas diferencias entre la secuencia de exones e intrones de este gen que son debidas a su polimorfismo genético. De todos los polimorfismos encontrados en la secuencia del gen AOC1, 3 de estos polimorfismos producen baja actividad enzimática en la metabolización de la histamina.

Personas portadoras de estos polimorfismos presentan una menor actividad de Diamino Oxidasa que individuos no portadores, siendo las diferencias en sus niveles de actividad significativas. Por otra parte, se ha asociado la variante p.T16M a un mayor riesgo de hipersensibilidad a AINES (fármacos antiinflamatorios no esteroideos), habiéndose propuesto como un biomarcador de respuesta clínica al tratamiento de patologías con estos fármacos.

El déficit de DAO parece ser más prevalente en la población con enfermedades inflamatorias intestinales, sobre todo se ha visto en pacientes con cáncer de colon. La Colitis Ulcerosa y la Enfermedad de Crohn son patologías donde también se ha visto Déficit de DAO.

Se ha comprobado la existencia de déficit de DAO en los postoperatorios intestinales. La Diamino Oxidasa se encuentra mayoritariamente en el intestino del ser humano y si se reduce parte de la mucosa disminuye respectivamente parte de la zona de producción de la enzima.

En pacientes con Enfermedad de Crohn, donde la actividad de la DAO en la mucosa intestinal se encuentra disminuida aproximadamente en un 50% respecto a la población sana, se ha observado una mayor tasa de recurrencia de la enfermedad después de haber sido intervenida quirúrgicamente. Por lo tanto se dice que la DAO podría ser un marcador útil para prever el riesgo de recurrencia o complicaciones en la EC.

Existe un conjunto de fármacos implicados en el déficit o en la baja actividad de la enzima Diamino Oxidasa. Bloquean o inhiben enzimas implicadas en la metabolización de la histamina, sobretodo de la DAO, o liberan histamina endógena. Este riesgo es de gran importancia, ya que se han publicado alrededor de 90 medicamentos implicados, algunos de ellos de uso muy común.

Se ha estimado que un 20% de la población utiliza alguno de estos fármacos, hecho que hace aumentar el riesgo de padecer los síntomas o patologías derivados de una acumulación histamínica.

En patologías como la migraña, un efecto del consumo de estos fármacos puede ser la cronificación de los síntomas, ya que gran parte de los medicamentos que se prescriben para paliar los efectos de la enfermedad son inhibidores de la DAO o liberadores de histamina endógena.

Entre los grupos de medicamentos publicados se encuentran analgésicos, antidepresivos, antirreumáticos, antiarrítmicos, antihistamínicos y mucolíticos, entre otros, estos últimos utilizados especialmente en niños (International Society of DAO Deficiency).

Estos conceptos nos llevan a concluír que actualmente la mejor forma de conocer la posible deficiencia de la DAO es mediante la investigación y cuantificación de la actividad de la enzima en sangre.

En el laboratorio, un test de inmunoensayo nos permite evaluar la actividad enzimática de la Diamino Oxidasa en una pequeña muestra de suero y en pocas horas.

La evaluación de esta enzima permite direccionar el tratamiento del individuo y su conducta alimentaria, disminuyendo sintomatología y mejorando calidad de vida.

Fuente: www.iaca.com.ar